El queso ibérico es un queso de pasta prensada elaborado con mezcla de tres leches (Vaca, oveja y cabra). De acuerdo con las proporciones establecidos en el apartado 4 del anexo I del Real Decreto 262/2011, del 28 de febrero, todo queso que se comercialice con la denominación “Ibérico”, debe estar elaborado con leche fresca en las siguientes proporciones: máximo del 50% de leche de vaca, mínimo del 15% de leche de cabra y mínimo del 15% de leche de oveja.
Se elabora durante todo el año. Diferenciamos el semicurado del curado por el periodo de maduración. El primero tiene un periodo de maduración de uno a tres meses, pasta prensada, masa compacta pero no cerrada, con pequeñas oquedades por todo el corte y de coloración amarillo pajizo sobre un fondo marfil, debido a la mezcla de las tres leches. El curado tiene de tres a seis meses.
Todos nuestros quesos están elaborados sin aditivos alimentarios y libres de lisozima, natamicina y sorbatos.
Sin gluten.
El queso Manchego está elaborado en la región de la Mancha, a partir de la leche de ovejas de la raza Manchega, produciendo así una leche peculiar que contribuye a dar el riquísimo y característico sabor al citado producto.
Se elabora durante todo el año. Diferenciamos el semicurado del curado por el periodo de maduración. El primero tiene un periodo de maduración de mínimo 60 días, el curado de 180 días y el viejo de 365 días.
El interior del queso es de color marfil, con ojos repartidos de forma homogénea.
Textura mantecosa, fundente en boca, con sabor franco, suave, profundo, propio de la leche de oveja.
Todos nuestros quesos están elaborados sin aditivos alimentarios y libres de lisozima, natamicina y sorbatos
Sin gluten.